Pensando entre Agujas

El título no es un titulo al azar, una pequeña muestra de algo, o un intento de ser un salao con el temita a tratar.

Es la pura realidad.

Los dolores de cabeza me atacan y persiguen desde una tierna edad y estoy casi seguro que es lo único que voy a heredar de mi madre que seguirá conmigo hasta el final de mis días y en mis peores momentos (aparte de un hermoso y bien surtido juego de recuerdos felices).

Si me pusiera científico aquí empezaría a sonar como la wikipedia y os soltaría una perorata de tipos de dolores de cabeza; la leve jaqueca, las potentes cefaleas, la archiconocida y risible resaca, las fatigas oculares. La estadística nos miente con números y nos dice que prácticamente el 90% de la población del planeta ha sufrido o sufrirá dolores de cabeza en su vida. Ahora mirad bien la estadística, porque habla de todos los seres humanos que han vivido hasta el momento, y eso es la hostia de gente.

Sí, es ahora cuando os alegráis de que los médicos que os tratan no sean de la Edad Media... lo de abrirte la tapa de los sesos no es un aforismo...

Mi caso, por cercanía*, trata de dolores de cabeza atómicos cuando era pequeño que me dejaban postrado en el sofá del salón intentando razonar con el cortex prefrontal que la habitación no podía estar dando las vueltas que se creía que daba. Y es jodido, porque ni te escucha. Si estaba moviendome malo, si me quedaba quieto era mucho peor. Pero no tanto como intentarse levantar... y así era la cosa.

Más adelante, ya en la uní, sufrí un pequeño episodio de desmayo por dolor de castaña. En época de exámenes para más inri. El salao del médico, tras decirme que me sobraban 10 kilos**, me dijo que era el estrés y que no estudiara tanto. (Págame tú la matrícula, imbecil...).
No salió por la ventana porque no le terminaba de ubicar, que si no... En esas fechas empecé a tomarme un medicamento, algo similar a un complejo vitamínico como el Ceregumil, pero que funciona (la jalea real esta asquerosa, por si alguien se preguntaba que más probé). Desde entonces, cuando necesito la sesera más activa, me lo tomo y por ahora no me he vuelto a desmayar.

Ojo, desmayar. Lo mio con los dolores de cabeza es crónico. No hace nada volvieron y con mucha fuerza, así que en agosto del año pasado empecé a ir al medico otra vez para tratármelo. Tras análisis de sangre y tal... conseguí un TAC, pues sospechaba de sinusitis; pero nada... y tras una frustrante consulta en la que el psicólogo que sustituía a mi medico de familia me dijo que mis causas eran psicológicas y que debía conocerme a mismo para quitarmelos (si las miradas mataran...)...

Ahora ya tengo un diagnostico, y un tratamiento. Lo que tengo con Cefaleas Tensionales Cronicas... unos dolores de tarro provocados por la tensión muscular del cuero cabelludo que oprime la caja craneal. Traduzco: mi cuero cabelludo conspira contra mi cerebro. El Efecto es como si te hicieran un corte de pelo ruso... constantemente... como el de la imagen de al lado.
Lo mejor es que los efectos secundarios de la medicina me dan mareos y me dejan el cuerpo como si me hubieran dado una paliza... Supuestamente mi cuerpo se acostumbrará y no serán tan brutos

Pero mientras toca pensar despacito y con cuidado, no sea que algún pensamiento toque donde no debe o pase por donde no tenga que pasar... y otra vez a empastillarse a tope.


Estoy con tanta cosa que casi tengo la sangre verde :P

Hasta otra.


OST de este Post:
Oasis - Angel Child



-----------------------------------
*[sí, es un chiste]
**["buenos dias" para presentarse es de débiles, lo que se lleva ahora es la humillación. ¿No has visto House?]