10.7.08

[se alquila este espacio]

Pensando, pensando pensé que si tal vez, y solo tal vez, la prostitución es el oficio más viejo del mundo la publicidad sea el 3º o el 4º, porque la cabida que tiene en nuestro día a día no es normal. Al menos si no se lleva mucho tiempo con ello.

No toméis este post como lo que no es. Muchas veces prefiero la publicidad a lo que echan por la tele, el pequeño arte. Pero es que de un tiempo a esta parte empiezo a sentirme agobiado por tanta y tanta y tanto anuncio/folleto/promoción/cartelote/autobús con pegatinas.

Tenemos publicidad por todas partes y la tenemos de todos tipos, que si marketing standard, viral, en grandes pancartas, en forma de eventos, como patrocinaciones de cosas... Tenemos publicidad hasta en la sopa... y ya empezamos a rozar el nivel del ridículo. Ideas tan 'fantásticas' como por ejemplo:


- Publicidad 'Acongojante':
Pongámonos en situación, tu caminas por la calle, atento a tus cosas quizás escuchando música. Y de repente oyes más alto que ningún otro sonido pero sin dejar de ser un susurro 'hay espíritus entre nosotros, no crees?...'. Te giras y ves que no tienes a nadie cerca, y vuelves a oír '¿tú lo crees?'.

Y antes de que te repongas del susto escuchas 'Entre Fantasmas. Primero en FOX'.

JaJa, que graciosa la broma. Esta publicidad tan superbliminal se realiza con un 'truco' de sonido llamado 'sonido direccional'. No he recordado donde dejé el enlace pero si usáis vuestro google-jutsu seguro que os aparece información interesante.

Supongo que no habréis leído el libro 'Mercaderes del Espacio'. En él se puede ver en un futuro 'lejano' que dos super empresas más poderosas que los gobiernos, intentan colar su publicidad como sea en la vida de la gente, llegando incluso al extremo de insertarla en los sueños*. Si ya intentan colarnosla a través del sonido y solo para nosotros... ¿qué será lo siguiente?


- Publicidad en el Metro:
Si, el metro, y no solo en los laterales de los vagones o en las gigantescas vallas publicitarias sino... en los túneles. Esta empresa pone pequeños paneles luminosos (que parecen querer comerte... o que compres...) que recuerdan a cajas de luz de dibujo en las paredes del túnel. Al pasar el vagón por el túnel da la sensación de que ves una película proyectada en las ventanas.





Como si no nos bastaran los carteles en la entrada, en los vagones, en el interior... en la estación y en las teles esas que ponen (tengo una pequeña teoría que dice que si alguien entra en una habitación no importa lo que haya dentro si hay una pantalla encendida, la persona irá primero a ver lo que tiene, aunque sea un Led Display con la hora...).


- Publicidad Personalizada e Inquietante:
¿Alguien recuerda Minority Report? Cuando el protagonista está en el metro unos dispositivos le escanean las retinas y le muestran la publicidad personalizada (llamándole por su nombre y preguntandole que tal le va, y recordándole sus ultimas compras) al entrar en una tienda. O en el Metro, mostrándole pantallazos de productos en los que podría estar interesado, según su perfil de consumidor.
Bueno, pues ahora estamos mas cerca de ese futuro con banners personalizados y con trastos como estos...
En ciertas ciudades de USA como San Francisco o Miami, los nuevos compradores de un Mini Cooper tienen la posiblidad de llevar un llavero con un dispositivo RFID** que permite a ciertos rótulos luminosos 'saludarles'.
Ejemplo: tu vas a tu bola con tu Mini... ti tirí ti ti***... y de repente ves que una enorme pantalla de leds te poner 'Hola [insert-name], que buen día para dar una vuelta con tu coche' y cosas así.

Personalmente me parece excesivo, ¿no han conseguido que compres su producto? ¿Entonces porqué te siguen dando la vara? Al menos es opcional, imaginad que está integrado en el ordenador de a bordo o algo así...


- Y lo que ya me parece lo más definitivo y parece rozar la autoparodia; publicidad SOBRE la publicidad:
Sabeis a lo que me refiero. Aparece un anuncio de lo que sea, probablemente sea de coches o perfumes y tiene una melodía pegadiza. Acto seguido aparecerá un operador de tonos para móviles (primero fueron midis, luego politonos y ahora reales... dentro de nada nos saldrán con sinfonicos o algo asi) que ofrece la cancioncita de marras o versiones.
Y un par de días después saldrá otro operador con una versión no oficial de esa cancioncita.
Más gracia hace cuando es el propio anuncio, a las dos semanas que tardan los publicistas en darse cuenta las pelas que pueden sacar, el que te suelta lo de '¿quieres esta canción en tu móvil?'.
¿Eh? ¿Quien ha dicho recurrencia?


-¿He dicho ridículo?




Un profesor de mi universidad sostiene que la publicidad en la tele no tiene propósito de ser actualmente, que esta siendo superada por la publicidad, más centrada a los posibles compradores finales como target de audiencia, interactiva que ofrece Internet.


La publicidad está en todas partes y yo ya estoy muy harto.
No me gustaría llegar a un futuro en el que para hacer/ver/disfrutar de cualquier cosa tengas que hacer oídos sordos a jingles (por muy geniales e ingeniosos que sean) o apartar un montón de banners holográficos, o cerrar los ojos en el metro para que la publicidad personalizada me deje en paz (aunque en Minority Report ni esto funcionaba... fijaos bien en la peli).

Un experimento curioso es apuntar en una libreta las marcas publicitarias que vemos todos los días, y si os divierte podéis contar con la marca de la libreta.




PostScriptum: Este post está patrocinado por Industrias Pesqueras Matsumura e Industrias Pesadas Tamaribuchi.




OST de este Post
Ben Folds Five - Evaporated








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*[hasta es 'homenajeado' en Futurama]


**[Un chip de Identificación por Radiofrecuencia, en sus siglas anglosajonas, envia y recibe información de su interior cuando encuentra un receptor en su misma frecuencia. Se usa, por ejemplo, en las mascotas, para localizarlas cuando se pierden.]

**[o 'tú turú tu tú', como a ti te guste más]

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2 Comments:

Blogger Penny said...

buena entrada, si señor. Me ha gustado.

salud!

penny vile

10 julio, 2008 23:10  
Blogger E. Martin said...

El protagonista de El Hombre Demolido de Alfred Bester comete un asesinato en un futuro donde los detectives son telépatas y para evitar que le lean la mente encarga y memoriza una canción a una compositora de jingles profesional. Segura "homenajeó" la idea en una historia de Burton & Cyb.

11 julio, 2008 14:07  

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